Hola, pequeños ELEfantes:
Hace ya dos años del comienzo de esta travesía por el máster de ELE. Han sido dos intensos años de retos y superaciones.
Como muchos de vosotros sabréis, los elefantes son mamíferos que no pueden saltar, pero ese factor no les impide seguir avanzando y luchando por recorrer miles de kilómetros con tal de encontrar la comida y el agua que necesitan.
Muchas son las dificultades que mis compañeros y yo hemos encontrado durante estos últimos 24 meses. En ocasiones ayudándonos mutuamente y en otras de forma individual, hemos conseguido sobrepasar cada uno de los obstáculos.
Uno de nuestros mayores proyectos ha sido la elaboración del TFM, para el cual hemos dedicado mucho tiempo y esfuerzo. Creo que hablo por la mayoría de nosotros, cuando digo que nos hemos servido de apoyo. Es de agradecer compartir grupo con unos compañeros tan maravillosos como los que, por suerte, coincidieron en mi promoción.
En mi caso, mi tutora de TFM era la Doctora Espejel, a la que también quisiera agradecer enormemente de nuevo en esta entrada su dedicación. No solo eso, sino también todas las ideas que ha aportado al proyecto, sus correcciones y, por qué no decirlo, también sus clases durante el máster.
Mi TFM se basaba en la creación de un Escape Room como actividad de cierre de nivel A1. Para ello, se utilizaron varios elementos físicos y electrónicos. Fueron muchos los quebraderos de cabeza, errores, correcciones y renovaciones que se tuvieron que realizar. Para finalizar el trabajo, se tuvieron que analizar una gran cantidad de materiales de ELE, así como herramientas TIC y juegos de escape.
Asimismo, fueron varias las asignaturas trabajadas a lo largo del máster las que permitieron desarrollar este trabajo, con elementos como las herramientas TIC, la creación de materiales y su adecuación a los niveles del Marco Común...Es por ello, que también quisiera agradecer a los profesores del Máster en FPELE de la UB y la Pompeu Fabra todo lo enseñado.
Creo que todos juntos hemos vivido diversas experiencias, algunas buenas y otras que no lo son tanto. No obstante, hemos experimentado, aprendido y crecido juntos, por lo que no cambiaría nada del pasado.
Finalmente, la mayoría de nosotros, ponemos punto (¿y aparte?) a esta travesía. Quizás algunos tomemos caminos distintos. Quizás continuemos juntos hasta el final. Lo que sí sabemos, es que esta carrera la hemos terminado, y si estamos aquí, ha sido por nuestro esfuerzo y colaboración en cada una de las etapas.
Ahora toca descansar, pero seguiremos creciendo y continuaremos nuestro viaje. Ojalá el destino nos vuelva a juntar.
¡Un millón de gracias a todos!